Preparando la Semana: Cómo Combinar el Homeschool y un Trabajo Online sin Perder la Calma

Cuando tomé la decisión de educar a mis hijos en casa mientras continuaba mi carrera como maestra online, sabía que sería un camino desafiante. Y la verdad es que lo ha sido. Pero con desafíos también vienen aprendizajes, y he descubierto que, aunque no es fácil, sí es posible lograr un equilibrio que funcione para nuestra familia.

Nuestro Horario: Organización y Flexibilidad

Mi semana se divide entre enseñar clases en vivo los martes y jueves, de 11:00 a.m. a 2:00 p.m., y dedicarnos al homeschooling los lunes, miércoles y viernes. Este esquema me permite enfocarme en mi trabajo y, al mismo tiempo, estar presente en la educación de mis hijos. Sin embargo, la realidad es que no siempre todo sale según lo planeado.

Hay días en los que el cansancio se acumula, mis hijos tienen dificultades para concentrarse, o una clase se extiende más de lo previsto. Pero también hay días en los que todo fluye, y siento que hemos logrado un buen balance entre mis responsabilidades laborales y el homeschooling.

Los Desafíos Reales

1. Gestionar el Tiempo y la Energía: El mayor desafío es, sin duda, el manejo del tiempo y la energía. No se trata solo de cumplir con las horas, sino de estar presente, tanto para mis estudiantes online como para mis hijos. Hay momentos en los que siento que estoy estirándome demasiado, pero también he aprendido a identificar esos momentos y tomar medidas para no agotarme.

2. La Presión de Hacerlo Todo Bien: La presión de ser excelente en ambos roles puede ser abrumadora. A veces me encuentro preocupada por si estoy dedicando suficiente tiempo a mis hijos o si mis clases online están a la altura de lo que mis estudiantes necesitan. Esta presión es real, pero también me impulsa a buscar soluciones creativas y a mejorar constantemente.

3. El Equilibrio Emocional: Combinar el homeschooling con un trabajo en línea no es solo un desafío logístico; también es un desafío emocional. Hay días en los que mis hijos necesitan más apoyo emocional, y en esos momentos, debo ser flexible con nuestro horario. Aprender a equilibrar estas necesidades con las de mis estudiantes ha sido crucial para mantener la armonía en nuestro hogar.

Estrategias que Hacen que Funcione

A pesar de los desafíos, he encontrado varias estrategias que me han permitido encontrar un equilibrio:

• Planificación Flexible: Aunque tengo un horario definido, he aprendido a ser flexible. Si un día algo no sale como esperaba, ajusto nuestras actividades en lugar de frustrarme. Esto me ha ayudado a mantener la calma y a asegurarme de que todos los días tengan un sentido de logro, aunque sea en cosas pequeñas.

• Delegar y Pedir Ayuda: No todo tiene que recaer sobre mis hombros. He aprendido a delegar tareas del hogar y a pedir ayuda cuando la necesito. Esto no solo alivia mi carga, sino que también permite que mis hijos asuman más responsabilidades en casa.

• Priorizar el Autocuidado: Mantenerme bien, tanto física como emocionalmente, es clave para poder cumplir con todas mis responsabilidades. Aunque tengo un horario apretado, trato de encontrar tiempo para mí, ya sea haciendo ejercicio, leyendo un libro, o simplemente tomando un descanso cuando lo necesito.

• Celebrar las Pequeñas Victorias: No siempre se trata de grandes logros. Aprendí a valorar y celebrar las pequeñas victorias, como un día en que mis hijos completan sus tareas sin problemas o una clase online que sale mejor de lo esperado. Estos momentos me recuerdan que, aunque no todo es perfecto, estamos avanzando.

Sí, Es Posible

No voy a decir que es fácil. Hay días en los que el equilibrio entre el homeschooling y mi trabajo online parece imposible de lograr. Pero también hay días en los que todo encaja, y esos momentos hacen que el esfuerzo valga la pena.

Lo más importante que he aprendido es que no se trata de hacer todo a la perfección, sino de encontrar un ritmo que funcione para nosotros. Con organización, flexibilidad, y un poco de paciencia, he descubierto que sí es posible combinar ambas responsabilidades sin sacrificar ni la educación de mis hijos ni mi carrera.

Este estilo de vida no es para todos, y definitivamente no es un camino libre de obstáculos. Pero si estás considerando combinar el homeschooling con un trabajo desde casa, te animo a que lo intentes. Con las estrategias adecuadas y una mentalidad flexible, puedes encontrar un equilibrio que funcione para tu familia.

Un abrazo,