Esta entrada es para esas madres homeschoolers que también trabajan desde casa. Sabemos que equilibrar el trabajo y la educación en el hogar puede ser todo un desafío. Con tantas responsabilidades en tus manos, es comprensible que a veces te sientas abrumada y sin saber por dónde empezar. Pero no te preocupes, ¡estamos aquí para ayudarte!
En este blog, vamos a compartir algunas ideas de rutinas y horarios que podrían funcionar para ti. Recuerda que cada familia es única, así que puedes ajustar estas sugerencias según tus necesidades y la dinámica de tu hogar. Lo más importante es encontrar un equilibrio que funcione para todos.
Mañana productiva, tarde creativa: Si tienes un horario de trabajo regular, una buena idea es aprovechar las mañanas para las actividades más académicas. Dedica ese tiempo a las asignaturas principales, como matemáticas, lengua o ciencias. Reserva la tarde para actividades más creativas, como arte, música o proyectos manuales. Esto te permitirá alternar entre tareas más estructuradas y momentos de inspiración y exploración creativa.
Bloques de tiempo: Divide tu día en bloques de tiempo dedicados a diferentes tareas. Por ejemplo, puedes establecer una franja horaria para el trabajo, otra para las clases homeschooling y otra para las tareas del hogar. Organízate para que cada bloque tenga un propósito específico y mantén la disciplina de respetar esos horarios. Esto te ayudará a mantener el enfoque y evitará que te disperses demasiado. Puedes utilizar una agenda, imprimir una hoja de calendario diario o utilizar aplicaciones como google calendar, entre otros.
3. Flexibilidad y adaptabilidad: Una de las ventajas de la educación en el hogar es la
flexibilidad. Aprovecha esta libertad para adaptar tu horario según las necesidades de tu familia y tu trabajo. Si un día se presenta más ocupado, puedes modificar tu rutina para dedicar más tiempo al trabajo y hacer que las actividades homeschooling sean más ligeras. La clave está en encontrar el equilibrio y no sentirte culpable si hay días en los que las cosas no salen según lo planeado.
4. Planificación semanal: Dedica un momento al inicio de cada semana para planificar las actividades que realizarás tanto en tu trabajo como en el homeschooling. Haz una lista de tareas, establece metas y prioridades. Esto te ayudará a mantenerte organizada y a evitar olvidos importantes. Puedes utilizar aplicaciones de organización o simplemente un calendario físico. La planificación te dará una visión general y te permitirá distribuir las tareas de manera más equitativa.
5. Delega y pide ayuda:
No tengas miedo de pedir ayuda cuando la necesites. Involucra a tu pareja, familiares o amigos cercanos para que te apoyen en ciertas tareas, ya sea en el cuidado de los niños, la preparación de comidas o la realización de las tareas del hogar. Recuerda que no tienes que hacerlo todo tú sola, y recibir apoyo puede hacer una gran diferencia en tu carga de trabajo.
Recuerda que cada familia es única y que encontrar la rutina perfecta puede llevar tiempo y experimentación. Sé amable contigo misma y celebra cada pequeño logro en el camino. ¡Tú estás haciendo un trabajo increíble al educar y cuidar de tus hijos mientras te desempeñas profesionalmente! ¡Ánimo, mamá homeschooler trabajadora!
Esperamos que estas ideas te sean útiles. ¡Nos encantaría escuchar tus propias rutinas y horarios exitosos! No dudes en compartir tus experiencias en los comentarios. ¡Hasta la próxima!
PD: Hace un tiempo también hice un video muy bueno acerca de este tema. Puedes verlo abajo.☺
Con amor,
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